Mi Presidente Gustavo Petro es, valga la redundancia, mi Presidente. Seguimos muy contentos por la elección popular que dio este resultado para el bien de todos los colombianos (incluso de los uribistas recalcitrantes). Necesitamos seguir apoyando las reformas e ideas de transformación social de nuestro presidente. Es menester estar convencidos que la labor no ha culminado sino que simplemente ha comenzado. Colombia debe abordar con urgencia los problemas sociales largamente postergados y casi olvidados por las castas políticas tradicionales. Esta es una oportunidad histórica. Creo firmemente que Petro está preparado para tal desafío nacional. Podemos lograr convertirnos en una gran Nación bajo la égida de Gustavo Petro. Sigamos apoyando y haciendo también control político desde nosotros, el Constituyente Primario, desde la ciudadanía, desde el pueblo razo que, como pocas veces en la Historia, tiene esta vez una voz.
Que esta sea una Nación donde nuestros hijos sean dignos de vivir.
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