🇫🇷 Macron: ¿el Chamberlain del siglo XXI? 🤔

El pasado 7 de Febrero de 2022, Emmanuel Macron, presidente francés, viajó a Rusia en la difícil misión diplomática de intentar desescalar un eventual conflicto bélico entre Rusia y Ucrania. Al día siguiente viajó a Kyev para verse con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski. Macron juega de mediador en la tensa crisis Europa-Rusia. Mientras tanto Olaf Scholz se reune con Biden en Washington para buscar salidas a la crisis. Una Europa sin liderazgo, sin autonomía militar, jugando aún a los principados de la Edad Media, en su confusión de lenguas, de fronteras, de egos nacionales y personalistas busca apaciguar a un Putin que sigue envalentonado por un EE.UU. al que él ve como en su época más débil, luego de su desastroza salida de Afganistán.

 

Putin fue en enfático al afirmar que podría usar armas atómicas, y que su contraparte se arriesga a entrar en una guerra con Rusia donde no habría ganadores. Llevando el lenguaje de disuasión más lejos. Habló de la destrucción mutua.

 

Todo esto parece un papelón, como diría un argentino. Palabras y palabras vacías mientras los hechos nos muestran que Rusia sigue emplazando todo su arsenal militar en la frontera Ucraniana, apoyando a las milicias paramilitares pro-rusas en Donetsk y Lugansk en la llamada Guerra del Donbás y presionando fuerte a Europa y a EE.UU. para que cumplan con sus condiciones.

Putin sigue tensando el arco mientras Europa se dedica a apaciguar sus ánimos con más y más palabras vacías. Ante el vacío de poder y de ánimo de liderazgo que hay en Alemania después del Fin de la Era Merkel (y por extensión en toda Europa), Macron decidió colocarse el traje de líder mediador.

Rápidamente Putin lo puso en la realidad; Dimitri Pekov, portavoz del Kremlin dijo esto en rueda de prensa:

"Francia es un país líder en la UE, Francia es miembro de la OTAN, pero París no es el líder. En este bloque manda otro país. Entonces, ¿de qué tratos podemos hablar?"

Macron juega así el triste papel que jugó el premier inglés Neville Chamberlain en Septiembre de 1938, en la llamada Crisis de los sudetes que fue la antesala del estallido de la Segunda Guerra Mundial. Hitler se anexionó amplias zonas de Checoeslovaquia donde residían minorías alemanas, así como partes de Polonia ¿Les suena familiar? ¿Georgia? ¿Crimea? Chamberlain accedió y retornó a Londres replicando ante la prensa que "Traía la Paz desde Munich".

Un Macron triunfante e infantil dijo luego de su gira que había obtenido el compromiso de Putin a no seguir escalando la crisis con Ucrania. El Kremlin lo desmintió enseguida.

Pareciera que el mundo intentara apaciguar las ambiciones territoriales de Putin y que intentara por todos los medios evitar una guerra. El manual de la preguerra de 1939 está hoy servido. ¿Habrá guerra con Rusia? Soy un gato aspirando a ser un león, no un futurólogo. 

 
¿Ustedes qué creen mis queridos Gatos Capitalistas? EL juego de ajedrez ya echó a andar y todas las fichas están posición de ataque.

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