Al parecer no existe. Descubrí esa tendencia que ya lleva muchos años en redes llamada #Journaling a finales del año 2024. Desde entonces comencé a hacer mis primeros intentos con no se qué cantidad de éxito. Pero en esa búsqueda de cómo hacerlo me encuentro con varias cosas interesantes: que la mayoría de elementos y stickers que se consiguen en el mercado son de colores vivachos, infantiles y muy enfocados a las chicas; la mayoría de cosas que se consiguen son para mujeres. Fue frustrante la búsqueda inicial así que me dediqué a buscar algo acorde. Quería hacer un ensayo, un experimento interior. Al principio me parecía un pasatiempo inútil y sin ningún propósito real. Luego descubrí que podía hacer algo interesante y usarlo como flujo de conciencia para algo que me está sucediendo hace ya varios meses y que quiero describir y descubrir y el journaling me puede servir para eso.
En cuanto a que los accesorios para journaling (pues como dije solo hay para chicas) decidí hacer mis propias cintas y stickers. Como se ve en la foto saqué pegatinas de Zizek (mi maestro), de Freud, de Lacan y otros elementos que quiero colocar en la agenda en la que escribo. Es una pelirroja muy linda que trabaja cerca a mi oficina. El caso es que seguí haciendo el ejercicio y me parece bastante liberador, creativo y de alguna manera divertido.
Me ha gustado demasiado el ejercicio. He redescubierto una parte creativa de mi que se había prácticamente adormilado desde que me gradué del colegio. De hecho siempre me gustó llevar un diario (oculto por supuesto); las únicas que llevaban diario eran las chicas, no estaba bien visto que un macho alfa tuviera un cuaderno donde escribiera cosas íntimistas, personales y mucho menos con tinte emocional y revelando una debilidad sentimental por nadie.
En Instagram, Pinterest, TikTok, Youtube hay decenas de cientos de personas que hacen todas estas actividades de journaling, que hacen cosas muy pero muy chéveres, personas endiabladamente creativas que convierten agendas y elegantes cuadernos con tapas de cueros, en verdaderas obras de arte, que transforman hojas de papel en sendos lienzos llenos de colores vivos, dibujos elaborados al detalle y con la máxima inspiración. Hay muchos, hay varios que sigo. Pero particularmente me gusta mucho una persona de España que hace cosas muy interesantes y de quien me inspiro para el ejercicio que yo hago. Si quieren verlo sigan este enlace.

Mi reclamo sigue vigente: no hay muchos accesorios para hacer journaling que sean para hombres. Casi que todo está enfocado en lo femenino y es no está bien. Existimos un grupo, aunque reducido sigue siendo numeroso, de machos alfa que en nuestras noches secretas hacemos este ejercicio de desahogo profundo e intimista para comprender un poco el trajín de los vaivenes de esta vida que se vive a diario y a plena luz del día. Pero hay otra vida que se vive de noche, en la oscuridad, en secreto, a veces en las tinieblas mismas del inconsiente. Y allí es donde debemos encontrar las raíces.
Si quieren saber sobre "La damita del Reich", déjenme su comentario en esta entrada. Nos vemos en un próximo post mis queridos gatos capitalista.